Desde que fueron creadas de vidrio soplado en 1888 por August Müller de Kiel, en Alemania, corrigiendo su miopía un año después, existen varios tipos de lentillas según su material, entre las que podemos encontrar las denominadas blandas, rígidas y semirígidas.
Quédate a saber más de los materiales que encontramos en las lentillas pues: hidrogel, hidrogel de silicona, permeables al gas o PRG y PMMA también llamadas plexiglás, son sólo algunos tipos de materiales empleados.

Lentillas blandas, hidrogel de silicona e hidrogel
Las lentillas denominadas blandas están fabricadas con hidrogel de silicona cuyo contenido en agua oscila entre el 38% y el 69%. Son muy flexibles y su mayor ventaja en comodidad reside en que se amoldan a la superficie del ojo muy rápido por su grosor muy fino.
Las de hidrogel son plásticos que retienen el agua, precursoras de las hidrogel de silicona, que se hicieron muy populares en los años 70 cuando gracias a este material se convirtieron en algo cómodo de llevar.
Desde que se lanzó el hidrogel de silicona en el año 2002, se ha convertido en el producto más usado en los laboratorios ópticos, pues es un material que permite usarse durante más tiempo.
Una de sus principales desventajas es que el hidrogel de silicona a día de hoy no se recicla. Tampoco es apta para los alérgicos a las siliconas.
Hoy en día son la recomendación estrella de ópticos y optometristas para todos aquellos que buscan confort y transición corta para corregir su visión y que además aporta la sencillez de poder cambiar tantas veces como se quiera de gafas de sol. Está considerada también la primera opción para los que sufren de “ojo seco”, pues es el material que mejor respuesta de permeabilidad y porcentaje de acuosidad aporta al ojo.
Lentillas de hypergel
Este material de última generación, denominado también Nesofilcon de la familia de los hidrogeles de silicona, es más maleable y fue diseñado para adaptase perfectamente al ojo. Este material imita su superficie proporcionando una visión nítida en cualquier distancia y la mayor comodidad de uso en lentillas.
Son las lentillas de hypergel las que mayor porcentaje de agua contienen, hasta el 78% por lo que siempre mantienen los ojos hidratados y naturalmente una buena oxigenación en la misma proporción.
Están indicadas para personas con presbicia y ojos sensibles, pues suelen encontrarse de uso diario.
Lentillas rígidas permeables al gas (RGP)
Las lentillas permeables al gas o RGP, nacieron de las PMMA un material plástico llamado plexiglás (polimetil metacrilato) y que era el más empleado para usar en lentillas. Como su nombre indica, más inflexibles e incluso con peso, no ofrecían comodidad al usuario pues eran susceptibles de caerse una vez puestas y también molestas.
La evolución de las lentillas permeables al gas y buscando permeabilidad al ojo de oxígeno y agua, nacen las RGP. Un material que favorece la lubricación del propio ojo y su respiración natural. De esta forma ayuda a que los depósitos de proteínas que se acumulan en las lentes de contacto sea mucho menor con las RGP.
Las lentillas rígidas RGP pueden usarse durante años pues es la opción de lentes de contacto de larga duración más económica en la actualidad. Por supuesto, con un buen mantenimiento constante y con base de los mejores productos especialmente diseñados para su conservación, limpieza, desinfección y esterilización. Un inconveniente es su período de adaptación.
Las lentillas permeables al gas están recomendadas para personas que sufren presbicia, astigmatismo o que hayan tenido alguna cirugía ocular.
Lentillas híbridas
Diseñadas para ser el equilibrio entre las RGP y las lentillas blandas de hidrogel de silicona, están compuestas por los dos materiales en diferentes áreas de la lente de contacto. Por un lado la visión nítida de las RGP en la zona central y por otro lado la permeabilidad de oxígeno y agua del hidrogel de silicona en la zona periférica.
El objetivo de la lente híbrida de contacto es proporcionar la corrección visual correcta en equilibrio con la comodidad y confort.
Son recomendadas para aquellos con astigmatismo que buscan una mayor comodidad. Los que padecen de presbicia, los afectados por queratoconos, aquellos a los que les han realizado cirugías refractivas y pacientes con traumatismos corneales.